en el que a cada gato se le buscan los tres pies

Aunque a todos los gatos nos une un amor común por el wireless, ni mucho menos somos todos iguales, debido a esto hemos encargado a un grupo de estudiosos de la Universidad del Gato con Botas la realización de un informe sobre las distintas castas gatunas que habitan entre la banda libre de los 2,4 Ghz.

El Gato Araña o Gato Spiderman:

Recibe este nombre al tratarse de un gato con un poder de adherencia mayor que el del mítico superhéroe llorica de la Marvel, y eg* que gato mas agarrao no os vais a encontrar. El gato araña considera demasiado caras las tarifas del ADSL ya no para ser pagadas, sino ni siquiera para ser tenidas en cuenta, muchas veces esta consideración es totalmente independiente del coste de estas tarifas y es mas debido al arraigo que ha tenido en nuestro país desde tiempos de mis abuelos la filosofía del estraperlo. El gato araña siempre cambia el wardriving por el warhousing, cualquier vecino es un potencial ISP, así como también lo son las instituciones publicas, léase universidades, centros de enseñanza secundaria, ayuntamientos…, alcanzan la felicidad plena cuando son capaces de robarle la conexión a alguna sucursal de banco cercana por la gratificación personal que supone devolverle la moneda al que te roba a diario. Los reconocemos fácilmente en la tienda porque siempre solicitan antenas grandes y baratas, preguntan sobre distancia de cobertura sin importarles los obstáculos y cuando se les pregunta el uso de la antena responden con evasivas, terminando con una sonrisita cómplice cuando se les inquiere por la distancia al vecino que se le quiere choricear la conexión. Siempre apostillan que solo lo quieren para navegar un rato y leer el correo aunque se les vea el nacido para emulear escrito en la frente. Es una casta muy amplia pero no demasiado peligrosa debido a su innata desorganización.

* Somos madrileños y nos llaman gatos, y decimos eg que, a ver que pasa!!!

El Gato Friki

El Gato Friki consta a su vez de varias castas:

El Gato Juanker

El lema del Gato Juanker es, `yo soy yo y mi modo monitor`. A diferencia del Gato Araña prefiere a los vecinos que tienen la red encriptada que a los que no, y es que las presas fáciles no son su estilo. Su dios se llama Atheros (dios Griego de los desencriptadores), piensa que cualquier comunicación que esta cifrada por el mismo hecho de estarlo merece ser descifrada. Vive del reto de romper las murallas que levantan contra el, y de demostrarse superior a todos y todo, duerme feliz pensando que no hay nada imposible para el.

El Gato Paranoico

El lema del Gato Paranoico es ‘yo soy yo y mi certificado’. Su peor enemigo y razón de su existencia es el Gato Juanker. Su misión en esta vida es la confidencialidad de los datos, cualquier conversación es suficientemente importante para ser encriptada, cualquier intercambio de datos merece ser protegido, certificados, WPA, servidores Radius, 802.1x son las armas con las que velara por la privacidad de todos los seres vivos de la tierra.

El Gato Megalómano

Este Gato, el Megalómano piensa que los de Google son unos pardillos, el es el único que sabe lo que se hace y se ríe del resto de infelices gatos que no tienen su visión. El Gato Megalómano siempre va acompañado por su Meganodo (que siempre esta en proyecto de construcción). Y es que sus proyectos están mas centralizados que la política del PP, su headquarter suele radicar en el tejado de su casa donde suele estar situado a su vez el meganodo, que se compone o bien de millares de antenas que cubrirán siendo pesimistas toda su comunidad autónoma, o bien de una antena tocada por la mano de dios (a modo de Santo Grial) que ya no solo dará cobertura a su comunidad autónoma sino que propiciara velocidades mas allá de la comprensión humana. Estos gatos son fácilmente reconocibles entre sus allegados ya que disfrutaban del mote del Flipao del barrio mucho antes de que supieran que es una red Wireless.

El Gato Linksys

El Gato Linksys es también conocido como Gato Linkinsys en los ámbitos rurales. Viven obsesionados con los firmwares alternativos, en una carrera continua por el aumento de funcionalidades de sus aparatos sean útiles o no. Su existencia cobra sentido al contarles a sus amigos lo que pueden hacer con sus cacharros azules. Son amplios conocedores de los tramites de garantía ya que irremediablemente acaban con los leds de sus routers parpadeando al intentar sin éxito que corran MacOS X, con el tiempo pueden sufrir una degeneración progresiva y dedicarse a meterle Linux a lavadoras, friega platos y se han conocido casos incluso de pruebas de actualización con animales vivos.

El Gato P2P

Esta casta de gatos también es conocida por el sobrenombre de Gatos Emuleros. Su vida se centra en su router ADSL Wifi, este ha de ser ADSL2+ y aguantar millones de conexiones. Pasan el día leyendo y posteando en foros donde se reúnen para hablar de los mejores routers del mercado, basan sus opiniones en creencias seudo mitológicas basadas en historias ascentrales de foros primigenios. La casta se divide en multitud de facciones, cada una adoradora de un router ADSL wifi distinto.

El Gato ‘semos azules’

El gato ‘semos azules’ es un gato que tiene sus raíces en el deporte español, y es que desde siempre hemos tenido grandes referentes de este tipo de gatos en nuestro país, Carlos Cardus, Arcarons, Carlos Sainz, Sete Gibernau (el cual da nombre a la casta), La selección española de fútbol, y muchos otros nos han enseñado el camino. Ya dentro del mundo informático estos gatos se caracterizan y son azules a su vez porque han vivido siempre acompañados del pantallazo de Windows y de Windows en si mismo, de los conflictos de IRQ, de los volcados de memoria, de los conflictos entre drivers. Son seres que tienen asumida su mala suerte pero no se dan por vencidos, entienden que no hay placer sin sufrimiento y que solo se aprecia lo que verdaderamente cuesta conseguir. Y para ellos el wifi es como la espada eXcalibur antes de ser arrancada de la roca por el joven Arturo. Y aunque la instalación de un dispositivo wireless no suele ser demasiado compleja se vuelve todo un reto cuando el escenario para dicha instalación es el entorno que estos seres arrastran en sus maquinas, ambientes totalmente hostiles donde no se puede dejar nada a la improvisación si se quiere llegar a una instalación satisfactoria. El superpoder más peligroso de estos gatos consiste en provocar conversaciones absurdas e hilarantes con los pobres técnicos de las empresas de hardware que muchas veces dan con sus huesos en el frenopatico después de una exposición demasiado agresiva a estos seres. Son fácilmente reconocibles ya que tienen la habilidad de generarse problemas disfuncionales con los utensilios mas simples y porque siempre le echaran la culpa de estos al hardware aunque acabe de llenar el deposito de su TDI con gasolina sin plomo.

2 comentarios sobre “en el que a cada gato se le buscan los tres pies”

  1. Mu bueno Luis

    se te pira la olla maaazo!! lo de gato me viene pa’l pelo por mira las horas que son y todavia sigo despierto :-)

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