Desde hace un tiempo a esta parte se esta viviendo una revolución en los hogares en cuanto al concepto multimedia se refiere, la tendencia del mercado es sustituir los soportes magnéticos habituales, CD-ROM, DVDs etc., por el streaming de video, usando el PC o mejor aun el NAS como dispositivo de almacenamiento.

Muchos de nosotros vemos nuestras películas preferidas bajadas legalmente de nuestra red P2P preferida en el salón, muy alejados de nuestro PC, situado a ciertos metros de distancia en nuestro Sancto Sanctorum que suele recibir el nombre de ‘nuestra habitación’.

La mayoría de nosotros suele grabar sus descargas en CDs o DVDs vírgenes y llevarlas al reproductor ‘leetodo’ de nuestro salón comprado en el Caprabo por 50 euros, pero esta solución trae varios inconvenientes. El primero de ellos es el tiempo perdido en las sucesivas grabaciones, y el coste que tiene los DVDs o CDs vírgenes que cada vez son más difíciles de conseguir sin el impuesto revolucionario de la SGAE.

Algunos espabilados graban las descargas en CDS regrabables, pero aunque esto haga disminuir el coste considerablemente, aumenta el tiempo perdido ya que la velocidad de grabación de los CDS regrabables es todavía mas lenta.

Así que el mercado Wifi desde hace tiempo nos ofrece una solución mucho mas optima y funcional, existen en el mercado reproductores multimedia que visualizan los contenidos audiovisuales directamente desde nuestro PC al televisor del salón de forma sencilla y eficaz. Normalmente el sistema se basa en dos partes.

Un software que se instala en nuestros PCS y que nos sirve para compartir los archivos que deseamos de nuestro disco duro a modo de servidor multimedia, y un hardware que normalmente tiene la forma de DVD (aunque no es necesario que la tenga :-) ), que hace de cliente de este servidor para poder visualizar las pelis del PC en nuestro Televisor.

Los únicos inconveniente que trae esto es que deberemos tener el PC siempre encendido (aunque claro eso ya lo provoca el emule), y que la capacidad de nuestros discos duros aunque recién comprados no lo parezca es finita.

Así que lo suyo es montarse un buen sistema de almacenamiento escalable (es decir que nos permita aumentar su capacidad con facilidad) y que sea autónomo (es decir que no necesite del PC encendido para su funcionamiento)

Por eso nace en los hogares la necesidad del NAS (Network Attached Storage), el NAS suele ser un cacharro (con forma de babosa o no :-) ), que se conecta a nuestra red ya sea cableada o wifi, y que tiene varios discos duros conectados, ya sea incluidos en el propio NAS, conectados externamente por USB o de las dos formas.

A los ficheros de los discos duros conectados al NAS se puede acceder desde el PC como si fueran carpetas compartidas.

Y para que no necesitemos el PC como servidor multimedia de estos ficheros se ideo en su día el protocolo UPNP (Universal Plug and Play), que se trata de un estándar que permite la intercomunicación de dispositivos de todo tipo, y que en nuestro caso nos viene bien ya que cualquier reproductor multimedia con soporte UPNP se podrá conectar a nuestro NAS con soporte UPNP sin pasar por el PC.

El NAS además de permitirnos prescindir del PC para ver las pelis, nos ofrece otras nuevas posibilidades, ahora con el NAS instalar un nuevo disco duro en nuestra red será mucho más sencillo, así como llevárnoslo de paseo sin tener que estar abriendo y cerrando el PC continuamente.

Seguidamente os pongo unos enlaces sobre los reproductores multimedia y NAS que veo más interesantes del mercado:

NAS

Linksys NSLU2 (precio aproximado 80,30 eur. + IVA)
D-Link DSM-G600 (precio aproximado 219,25 eur. + IVA)
Netgear SC101 (precio aproximado 111.19 eur. + IVA)

Reproductores Multimedia

Kiss DP-1500 (precio aproximado 130,12 eur. + IVA)
Kiss DP-600 (precio aproximado 258,91 eur. + IVA)
D-Link DSM-320 (precio aproximado 145,33 eur. + IVA)
D-Link DSM-320RD (precio aproximado 272,50 eur. + IVA)